Translate

lunes, 16 de noviembre de 2009

Sigamos

Sigamos, porque no queda otra opción
si queremos continuar siendo, estando, viviendo.

Sigamos aunque el viento sople tan fuerte
que nos desbarate por dentro los recuerdos y las virtudes.

Sigamos en los días claros cuando la luz nos invite a salir,
a vivir los momentos hacia afuera.

Pero sigamos también en los días oscuros, aunque la negrura invada
hasta los rinconces más angostos del alma propia.

Sigamos y abracemos la vida bien fuerte, cada paso, cada suspiro
incluso si tropezamos mantengámosla bien sujeta.

Sigamos y encontraremos en el camino a otros como nosotros
o que no tengan nada que ver ni con ellos mismos,
y démonos en parte pero sin olvidarnos de nosotros.

Sigamos, cuidándonos y queriéndonos,
protegiéndonos a veces pero no siempre,
que también hay que dejar entrar en nuestra vida
elementos que dejarán de ser extraños algún día.

Sigamos, con el corazón, los ojos, las manos y el cerebro
bien dispuestos a seguir aprendiendo,
que esto del vivir es lo que conlleva,
es un continuo aprendizaje
incluso de olvidar lo aprendido.

2 comentarios:

giovanni dijo...

Me llama la atención que tu primera imagen o metáfora es del viento que sopla fuerte... Escribí hoy algo sobre el viento... Me gusta la repetición de 'sigamos' y comparto que no hay que protegerse siempre.

Un beso

Elena Martín dijo...

gracias una vez más por tus palabras :)
siempre me sorprenden las casualidades, en este caso la casulidad de que ambos hablemos sobre el viento, que despeina, que empuja, que hace que el mar se embravezca.
Besos Giovanni